sábado, 23 de enero de 2021

NUEVOS SONETOS

 



                                Te recuerdo Amanda. / Tinta sobre cartulina / O. Moré 2020/ Cuba




I


Monólogo de un pez en diáspora.


¡Bienvenida la muerte, bienvenida

a mi cuerpo de nubio putrefacto,

bienvenida a esta escena, fin del acto,

bienvenida matrona, bienvenida!


¡Bienvenidas la sombra y su embestida

a esta noche inmoral, negra y sin pacto,

bienvenidas al punto de contacto

donde el mar vuelve a ser arma homicida!


No te temo, señora, no te temo,

ya viví una vida entre “soflamas”;

puedo irme con Caronte, dame el remo...


Yo ya estuve en el Hades, y en sus llamas

me forjé una coraza, no me quemo

ni en comedias, monólogos ni dramas.



O. Moré ® 2021


II


Discurso para el mismo pez con asonancias intersonetales.


El agua en la clepsidra es peligrosa,

el tiempo la envenena y la coarta,

y tienes que salir vivo de Esparta

a lomos de una balsa temblorosa.


La tierra prometida está borrosa,

apenas se le ve y ya te infarta;

al lado del timón la última carta

que madre te escribió triste y llorosa.


No sabes qué futuro a ti te espera;

la jungla del asfalto y los cristales

no tiene el buen color de la quimera.


Mas sabes que has fundido tus metales,

que el mundo en su trotar no admite espera

y es hora de forjar tus ideales.

 



O. Moré ® 2021



III


El llamado de Dios


Que vengan hacia mí los iletrados,

los tontos del redil, los aguafiestas,

que vengan las fulanas manifiestas

del sexo interracial y los pecados.


Que vengan los idiotas contumaces,

las vírgenes del vicio y la lujuria,

los perros apestados, la penuria,

los frikis del montón con sus disfraces.


Que vengan los borrachos de poemas,

los tímidos, los zurdos, los tunantes,

los falta del moral con sus dilemas,


que soy Dios en un circo itinerante

y les quiero curar llagas y eccemas

con mis versos de bardo tolerante.




O. Moré ® 2021



IV


Interrogatorio con supresión del es



Cuál el agua que mueve los molinos,

cuál el viento que agita las veletas,

cuál el gas que expelen los cometas,

cuál la piedra que corta los caminos.


Cuál el fuego que quema los destinos,

cuál el polvo que cubre viejas metas,

cuál la tinta de negras historietas,

cuál la tierra de ilusos peregrinos.


Cuál la savia de árboles del mal,

cuál el lodo de inútiles pantanos,

cuál la arena que cae hasta el final.


Cuál el vidrio de espejos inhumanos,

cuál la sangre del último mortal,

cuál el cielo de ateos y paganos.



O. Moré ® 2021



V


Antropofagia del Fauno


A veces me camuflo entre la hierba

como un fauno ridículo y dolido

mas otras soy un légamo de olvido,

inocente que en barro se preserva. 


A veces la jauría me destroza

y quedo a la merced del ojo humano

y apenas puedo ser indio cubano

siendo carne de fauno pesarosa.


Otras veces, antropófago del yo,

me devoro a mí mismo lentamente

sin saber qué poema me mató.


Y luego, cuando el sol muere silente,

germino donde el verso me enterró

trastocado en poeta displicente.



O. Moré ® 2021



VI


Dime, poeta



 ¿En qué lago de oscuras soledades

hundiste tu cabeza de Mercurio

y en qué muros de místicas ciudades

mataste el revival y el buen augurio?


¿En qué mares dejaste las verdades,

en qué puerto, qué dársena o tugurio?

¿Dónde han ido el valor y sus bondades;

por qué hay en tu versar un viso espurio?


¿Poeta, dime cuándo y dime dónde

la pulsión se  te escapó inapetente…?

¿Si en la gruta de Sócrates se esconde?


¿A qué cielo de negro decadente

echaste tú a volar el verso, a dónde,

jugando a ser un mártir combatiente?



O. Moré ® 2021



VII


Ausencia.


La casa está vacía, tu presencia

se ha ido a deambular a otro universo,

y mudo me he quedado, no converso,

la afasia me tortura con violencia.


Acudo a la canción con la inocencia

de un chaval que adolece, algo perverso.

No logro exorcizar ni un sólo verso,

me hundo en un abismo de impotencia.


Te escribo en la pared letras extrañas,

signos raros y símbolos fugaces

en una surrealista telaraña.


Luego acudo a mi armario de disfraces,

me visto de Neruda, él me acompaña,

a ver si al fin te encuentro entre mis frases.



O. Moré ® 2021



Las  ilusiones perdidas…


Perdida la razón, ganado el canto,
mi cuerpo  se debate misterioso
y juega a ser versado y melodioso
en una partitura hecha de llanto.

Perdida la memoria, yo entre tanto
dibujo fantasías y ominoso
me entierro en una cárcel, lujurioso,
con diosas que me envuelven es su manto.

La vida me ha cambiado, no hay espera,
el tiempo se ha burlado en mis espejos
jugando a que fui un trozo de quimera.

Hoy sé que ya extravié los catalejos,
que muero en este mar negro pantera
consciente que he perdido los reflejos.

O. Moré ® 2021


Llamado a filas


Venid  hermanos locos, vestid de calaveras,
sacad vuestros disfraces  de duendes sin derrotas,
salid a la calzada para retar a idiotas
y asesinar a versos a todos los horteras.

Venid con un soneto o décima o romance,
cubriros la pechera al detonar las minas,
armaros con bazucas o con las golondrinas
de Bécquer y disparen a corto y largo alcance.

Sacad de vuestro fuero el genio necesario,
alzad bien la cabeza y rimen a destajo,
y empuñen bien el rifle de nuestro abecedario.

Ganemos la batalla, cortemos el badajo
a tanto cursi absurdo en este “animalario”,
mandémosles ¡Joder! a casa del carajo.


O. Moré ® 2021


Juego de sombras eufónico
(sonetillo)


Sombra larga del ciprés,
alargada sombra larga,
sombra que inhibe mi adarga
sombra antigua del después.

Asombrado.  Sombra es
mi sombra que es dura carga.
Carga la sombra la amarga
melodía de mi estrés.

La sombra tiñe mi pecho,
y apechugo tanta sombra
sombreado cual un desecho.

La sombra absurda me nombra
imagen gris del acecho
cuando la vida me asombra.


O. Moré ® 2021